Lo primero enviar desde aquí mis ánimos a Eric Abidal, un jugadorazo tapado por el equipo en el que juega, pero al fin y al cabo una persona como tú o como yo, que le ha tocado jugar su partido más duro y del que estoy seguro que saldrá victorioso muy pronto.
Lo segundo felicitar a los madridistas que siete años después vuelven a jugar unos cuartos de final de la Champions. Buen partido el del miércoles, con su sesteo habitual en la primera parte pero demoledores en la segunda. Marcelo cada día me gusta más y Benzema ha puesto a todos en su sitio con goles, curiosamente cuando se le ha empezado a dar confianza y minutos, cosas claves en un futbolista joven, que no había salido de su ciudad en la vida y al que le ha tocado dar la cara en el club más mediático del mundo.
Así que hoy estará en el bombo junto a Barcelona, Chelsea, Manchester, Tottenham, Shaktar, Schalke e Inter. Me gustaría que los equipos españoles se evitaran, por una sencilla razón, cuanto más tarde se enfrente más emocionante será. Aunque me gustaría que fuese en semifinales. Siempre he dicho que vivir una semifinal de tu equipo en Champions debe ser algo maravilloso. Saber que con una victoria estás en la finalísima no debe tener precio. Con el campo a rebosar, es un partido para todos ya que la final solo la disfrutan unos cuantos que además de poder permitirse viajar han tenido la suerte de que les tocara la entrada.
Me gustaría ver a Raúl, Torres o Eto´o en cualquiera de los dos campos españoles. No quiero ni de lejos al Manchester (ese Chicharito es un bendito) y si podemos evitar al Tottenham de Bale mejor que al Shaktar de Jesucristo Chygrynskiy, pero bueno, la suerte dirá, o las manos de al que le toque sacar las bolas, no sé porque me da que va a salir de tal manera que Madrid y Barcelona sólo se puedan ver en la final...
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